Las empresas eligen, pero los trabajadores también. Y, siendo así: ¿cuáles son las características que tienen las que se consideran las mejores empresas para trabajar?
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¿Cómo elegir una buena empresa para trabajar?
Obviamente, el rango salarial es uno de los factores más influyentes. Sin embargo, y más después de la pandemia, hay toda una serie de indicadores no tangibles que hay que tener muy en cuenta en el momento de valorar una oferta laboral.
Uno de estos condicionantes al alza, por ejemplo, es el propósito de la compañía y cómo está valorada por la sociedad, si pone o no en valor la sostenibilidad o la innovación, cómo se comunica con sus grupos de interés y, en definitiva, si su misión encaja también con los objetivos personales.
9 características de las buenas empresas para trabajar
Todo lo que no es económico (el ambiente con los compañeros, el reconocimiento, la organización, la flexibilidad laboral…) es lo que se ha acabado denominando “salario emocional” y es tan o más importante que un sueldo generoso a fin de mes. Así, además de unas condiciones económicas adecuadas, estas son algunas de las características que aúnan las mejores empresas para trabajar:
- Instalaciones y localización del lugar de trabajo. Unas instalaciones adecuadas y seguras, con espacios luminosos y bien equipados estimulan la productividad y el bienestar de los empleados. Igualmente, la ubicación es clave para reducir los desplazamientos y facilitar el equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
- Flexibilidad horaria con opción de teletrabajo si es posible. Disponer de cierto margen en la hora de entrada y salida así como la posibilidad de trabajar desde casa o de forma remota facilita la conciliación personal y puede mejorar la satisfacción y la calidad de vida.
- Plan de crecimiento dentro de la compañía. El desarrollo profesional dentro de una compañía es uno de los puntos más importantes para poder hacer carrera dentro de la misma. De este modo, son imprescindibles los planes de carrera y las opciones de promoción interna.
- Reconocimiento de los logros y política de comunicación. Es importante que las empresas reconozcan y valoren el trabajo y los logros de sus empleados. Esto se puede conseguir a través de programas de reconocimiento, incentivos, bonificaciones o elogios públicos. Además, una buena comunicación interna es esencial para mantener a los empleados informados sobre los objetivos de la empresa, los cambios en la organización y las oportunidades disponibles. Una política de comunicación transparente y abierta fomenta la confianza, el compromiso y el sentido de pertenencia.
- Beneficios para los empleados como seguro médico, subsidios para actividades deportivas o culturales o descuentos en productos o servicios. Hay una gran variedad de alternativas con el mismo fin: demostrar el compromiso de la empresa con el bienestar y la calidad de vida de sus empleados, lo que a su vez promueve la satisfacción y la retención del talento.
- Programas relacionados con el bienestar emocional como asesoramiento psicológico, talleres de manejo del estrés, actividades de mindfulness o programas de apoyo en caso de situaciones difíciles. Estos programas ayudan a los empleados a mantener un equilibrio emocional saludable y afrontar los desafíos laborales y personales de manera efectiva.
- Formación y oportunidades de desarrollo. Proporcionar formación de calidad permite a los empleados adquirir nuevas habilidades, mantenerse actualizados en su campo y sentirse valorados. Estas oportunidades de desarrollo profesional también demuestran el compromiso de la empresa con el crecimiento y el progreso de sus empleados.
- Ambiente de trabajo agradable. Un entorno laboral positivo y amigable contribuye al bienestar de los empleados. Las empresas que se preocupan por crear un ambiente agradable promueven la colaboración, la comunicación abierta, el respeto y la diversidad.
- Propósito claro y significativo más allá de las ganancias económicas. Un objetivo inspirador y alineado con los valores de los empleados crea un sentido de pertenencia y compromiso y fortalece la identidad de la empresa como un lugar de trabajo deseado y significativo. Los empleados se sienten motivados al saber que su trabajo contribuye a un propósito más grande y que están haciendo una diferencia en la sociedad.
Empresa familiar desde 1876 y líder mundial tanto en negocios industriales como de consumo, en Henkel tenemos unos ambiciosos objetivos medioambientales y sociales, recogidos en un marco estratégico que revisamos año a año guiados por nuestros valores y nuestros propósitos, entre otros:
- Crear mayor valor para el cliente y el consumidor para superar nuestros mercados
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