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La metodología agile: el impulso de transformación de la cultura corporativa de Henkel

Ventajas corporativas a la hora de aplicar la metodología agile en el entorno laboral.

Empleados / Personas 20 feb. 2024

En un mundo empresarial en constante evolución, la capacidad de adaptación y la rapidez en la toma de decisiones son sin duda fundamentales para el éxito de las organizaciones. La metodología agile se consolida como un pilar fundamental dentro de la cultura corporativa de Henkel, impulsando la innovación y la eficiencia en todos sus procesos. Una filosofía que nos ha ayudado a clasificarnos hoy en día como una de las mejores empresas para trabajar en España.

En este artículo te contamos qué es la metodología agile, sus beneficios corporativos y cómo nos ha ayudado a transformar la cultura corporativa en Henkel.

La metodología agile

¿Qué es la metodología agile?

La metodología agile o ágil en español, es un enfoque de gestión y desarrollo de proyectos basado en la colaboración, la flexibilidad y la entrega continua de valor. Originada en el ámbito del desarrollo de software, su aplicación se ha extendido más allá del ámbito tecnológico, dados sus numerosos beneficios en la gestión de proyectos de toda índole.

En lugar de seguir un plan detallado y rígido, la metodología ágil o agile se enfoca en adaptarse a los cambios en los requisitos y en las necesidades del cliente a lo largo del proyecto. Para ello, hace uso de iteraciones cortas y regulares, llamadas sprints, gracias a las cuales se desarrolla, se hacen pruebas y se entrega una parte del producto final. Todo ello, permite mayor rapidez en la respuesta a los cambios, una entrega temprana de valor y una mayor colaboración entre los miembros del equipo.

Gracias a sus novedosas características, la metodología agile ha demostrado ser una poderosa herramienta de transformación empresarial al fomentar la colaboración, la innovación y la eficiencia de una organización a la hora de enfrentar los desafíos del presente y anticiparse a los que se puedan presentar en el futuro.

¿Cuáles son los principios y las principales características de la metodología agile?

La metodología agile se rige por el “manifiesto agile”, que establece principios como la importancia de poner el foco sobre el valor de las personas y su colaboración, priorizando siempre la comunicación directa y efectiva dentro del equipo. Además, fomenta la filosofía de involucrar al cliente de manera activa durante todo el proceso de desarrollo, reconociendo la necesidad de adaptarse a los cambios en los requisitos del proyecto y priorizando la flexibilidad y la capacidad de respuesta en vez de mantener la rigidez de un plan inicial.

De tal manera, estos principios fundamentales guían la filosofía y práctica de la metodología agile, promoviendo una mentalidad centrada en el valor del producto, la colaboración efectiva y la adaptación continua.

Destacamos las cinco principales características de la metodología agile:

  1. La flexibilidad: La metodología ágil se adapta fácilmente a los cambios en los requisitos y necesidades del cliente a lo largo del proyecto.
  2. Una metodología iterativa e incremental permitiendo una entrega temprana de valor y la posibilidad de ajustes continuos.
  3. La colaboración, la auto-organización y la retroalimentación: Fomenta la colaboración estrecha entre los miembros del equipo, así como la comunicación frecuente y transparente. Además, promueve la evaluación constante del progreso y los resultados, así como la retroalimentación regular tanto de los clientes como de los miembros del equipo, para realizar ajustes y mejoras continuas.
  4. Un enfoque continuo en el cliente mediante la entrega continua de productos o servicios que satisfagan sus necesidades y expectativas.
  5. La entrega de valor continuo a través de mejoras incrementales en lugar de esperar a tener un producto completamente desarrollado.

¿Cuál es la diferencia entre la metodología ágil y una tradicional?

La diferencia principal entre la metodología agile y la tradicional radica en su enfoque y forma de trabajar. La metodología tradicional, también conocida como enfoque en cascada se basa en un plan detallado y rígido que se sigue secuencialmente, donde las fases de desarrollo no empiezan hasta que se hayan completado las fases previas.

Mientras que la metodología ágil es iterativa y flexible, la tradicional sigue un enfoque más estructurado y planificado.

Ventajas corporativas de la metodología agile

La metodología agile ofrece numerosas ventajas para las empresas y equipos de desarrollo. De hecho, no es de extrañar que la mayoría de las mejores empresas para trabajar en el mundo hayan puesto en práctica la metodología agile dentro de su cultura corporativa.

Destacamos las siguientes ventajas corporativas a la hora de aplicar la metodología agile en una empresa:

  • Gran adaptabilidad al cambio y reducción de riesgos: La entrega temprana y frecuente de partes del producto permite identificar y mitigar riesgos de manera anticipada, lo que contribuye a la gestión efectiva del proyecto.
  • Mayor productividad: Facilita la entrega continua lo que permite a los clientes obtener valor desde etapas tempranas del proyecto.
  • Mayor calidad del producto final: Al centrarse en la entrega incremental y la revisión continua, la metodología agile tiende a producir productos de mayor calidad, ya que los problemas se identifican y se abordan de manera oportuna
  • Mejora de la motivación y del compromiso del equipo: Al empoderar a los equipos para tomar decisiones y organizar su propio trabajo, la metodología agile promueve un mayor sentido de responsabilidad y satisfacción en los miembros del equipo.

La metodología agile en Henkel: ejemplos prácticos

La cultura corporativa de Henkel pone en práctica la metodología agile en todos sus diferentes ámbitos. Así, una de las principales ventajas de la metodología ágil en Henkel ha sido su capacidad para fomentar la colaboración interdisciplinaria entre las diferentes unidades de negocio. Los equipos multifuncionales trabajan de manera conjunta a la vez que autónoma, compartiendo responsabilidades y conocimientos para alcanzar objetivos comunes. Esta colaboración dinámica no solo ha mejorado la eficiencia operativa, sino que también ha estimulado la creatividad y la innovación empresarial en todos los niveles de la organización.

Otro aspecto clave de la metodología agile en Henkel se centra en la entrega de valor continuo. En lugar de esperar a tener un producto o servicio completamente desarrollado, los equipos trabajan en iteraciones cortas y regulares, entregando mejoras incrementales de manera constante. Esta mentalidad le ha permitido a Henkel adaptarse rápidamente a las cambiantes demandas del mercado, ofreciendo soluciones que satisfacen las necesidades de sus clientes de manera ágil y efectiva. Ejemplo de ello son nuestras soluciones innovadoras para packaging más sostenible.

En Henkel, la adopción de la metodología agile ha sido un proceso gradual pero transformador empleando un enfoque holístico que ha permitido nos ha permitido aprovechar al máximo los beneficios de la agilidad en toda la organización e impulsar una cultura corporativa de aprendizaje y mejora continua.

El reconocimiento de Henkel como una de las mejores empresas para trabajar a nivel nacional se fundamenta en su enfoque hacia la innovación, la sostenibilidad, la transformación digital, sus actividades de responsabilidad social corporativa además de fomentar una cultura corporativa inclusiva y diversa.


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